Aquí, en estas desiertas tierras alejadas de la realidad, en donde la naturaleza me acaricia y veo el nostálgico horizonte reflejando el triste ayer, camino junto a la soledad y mis pensamientos.
Los ecos del pasado son como un coro celestial que se escuchan desde los cielos inundando mi alma de amor y dolor.
Juan Carlos Alaniz-