Poemas

Mirando atrás

Una dulce mirada me observa, reflejada en la ventana,

y un halo de tristeza me envuelve.

Es mi otro yo, como una matriusca.

No soy el pasado, aún no soy el futuro.

Sólo sé que soy el presente.

Aquellos ojos son los mismos que los de mi niñez

cuando miraba embelesada aquel maravilloso reloj

de cuco, con sus manecillas doradas y aquella oscura

madera por la que no parecía pasar el tiempo y que

colgaba en la pared abarrotada de cuadros de la tienda.

Aquella tienda de antigüedades, recuerdo de mi pasado

está allí, viendo pasar la vida, en un rincón de la plaza,

como no queriendo llamar demasiado la atención,

testigo de un pasado lejano y de un futuro incierto.

Cierro los ojos e intento graba en mi memoria

esos aromas a madera, ese remanso de paz,

esa penumbra con un destello de luz

temerosa de que deje de existir antes que yo.

 

Ma. Asunción Camps Jarque-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *