Vagando por las calles y senderos,
de la realidad y de mi mente,
buscando respuestas inexistentes,
aquella luz que me de aliento.
Triste, cansado y adolorido;
casi muerto y sin esperanzas,
viviendo una realidad vacía,
mi vida acaba poco a poco.
Realidad cruel,
verdad mentirosa,
esperanzas vacías,
mi único refugio…tus brazos.
Tu moza de mozas,
princesa de mis pensamientos,
reina de mi mente,
dueña de mi corazón.
Tú, la luz de que buscaba,
la salida de mi realidad,
mi esperanza, mi verdad,
aquella diosa de mis días
y mis sueños de noche.
Tu mi rosa de los vientos,
mi guía,
muéstrame el mundo desde tus ojos,
aquella luz que tú emanas.
Mis sueños reposan en tus manos,
mis metas en tus ojos
mis sentimientos en tu corazón,
mi vida dentro de tu alma.
Brújula de mi vida,
muéstrame el camino,
hacia un nuevo horizonte para mi vida,
un nuevo día.
Tu luz que iluminas mi espíritu,
y tu espíritu mi corazón,
tú la persona con la que sueño cada día,
te convertiste en mi gran anhelo.
Diego Sánchez-