Poemas

A una lágrima

Gota del mar donde en naufragio lento

se hunde el navío negro de una pena;

gota que, rebosando, nubla y llena

los ojos olvidados del contento.

Grito hecho perla por el desaliento

de saber que si llega a un alma ajena,

ésta, sin escucharlo, le condena

por vergonzoso heraldo del tormento.

Piedad para esa gota, que es cual llama

de la que el corazón se desahoga

cual desahoga espinas una rama.

Piedad para la lágrima que azoga

el dolor, pues si así no se derrama,

el alma, en esa lágrima se ahoga…

 

José Ángel Buesa-

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