Su nombre
sus ojos
sus pensamientos
que laboran
calladamente
para construir
remolinos de papel
con sus colores de ámbar
amarillo-verde-rojo
girando en una danza
que viró subiendo escalones de cemento
mientras el sueño de sus ojos
están descansando en el recuerdo
de aquel mar sonámbulo
que supo deletrear su nombre
respirando la hora náutica
de los ángeles
cuyas plegarias
enlazarán ahora el sueño
de mis ojos.
Rubén Gómez Ramírez-