Hoy mi perrito no está…
En un recodo de vida
fue mordido por la muerte.
En mis días quedarán
su presencia divertida,
sus ojazos y la suerte
de merecer tanto amor!…
En silencio sólo espero
que desde el cielo perruno
baje en los rayos del sol
para ladrarme un “te quiero”.
COMO ÉL NO HABRÁ NINGUNO!
Silvia L. de la Cal-
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