Poemas

Últimamente

Paisajes que pasan por el cristal de tu ventana,

como un mar revuelto se detiene el tren de la vida,

como pasajero de mi mente, como cometa que vuela

y por ahí arriba hace más viento, que a ras del suelo.

En ese duelo uno se vuelve algo demente,

repite esa vocecita interna, que te sube y te baja,

como en la mano de un niño que no se harta de jugar.

Como la orilla con sus olas o estos versos con su poema,

el ego se marea y como en un barco que se salva,

cambia el viento de rumbo hacia el horizonte

de repetirse como un eco que no duele.

La solución es escribir, llenar la hoja de palabras

y poner la mente en blanco y vestirse de amarillo,

con el velo del olvido que tapa de cuerpo entero.

Entonces y sólo entonces, llega la oración de silencio

y el verbo se hace carne, donde sólo Dios basta,

y te guarda cobijo allí donde el sueño es amor.

Aunque sólo sea un instante, pero que instante, sinfín.

 

Salvador Fides-

Comments

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *