Nostalgia de barrio,
no es solo nostalgia,
es toda la infancia
jugueteando en él,
tras paredes toscas,
entre los zaguanes,
cuando la inocencia
reía en mi piel…
Fue entonces la magia
de amigos que eran
las manos abiertas,
abrazos de miel.
Y el brillo en los ojos
miraba el presente
el caleidoscopio
no lloraba a muerte.
Y las nubes vagas
que se van borrando
con el calendario
y vientos de ayer,
cargan la alegría
de las risas leves,
siempre compartidas
de mi carnaval…
Me acuerdo de aquella,
mi primera estrella
en el firmamento
de mi corazón,
y el mundo que late,
sigue tras mis pasos
por el derrotero
buscando ese amor
Fundida en las venas
quedó esa estampa,
un fuego que aviva
mis ganas de ver
el barrio, que aún muestra,
aquello que fuimos
y crece el coraje
de volver a ser.
Letra de tangos con música de Pascual Mamone.
Haidé Daiban-