El trueno eclosiona,
abrazado a la tormenta
entre estertores cósmicos,
sellan la alianza
para bien o mal del Universo.
En esa simbiosis
de fuego y mansedumbre
somos granizo, ventisca
dando vida a esta sinrazón de existir.
En el trance,
nos une el cordón umbilical
de la creación.
Formamos parte del verbo
estamos en la paleta del pintor
jugando entre acuarelas y pinceles
dando la luz y los colores
somos la pasión.
Sentimos con la música
y su arrullo.
Colgados de los altos rascacielos
temblamos con ellos y lo que guarda
su estructura.
Quinquela, desde el bajo
nos tiñe de azul las esperanzas
con la espuma murmurante del Río
y sus misterios.
Victoria Asis-