Colgando de hilos
sentimientos de antaño
buscando senderos
para no olvidarlos
aferro a mi pecho
tu ambiguo recuerdo
mecido en mi almohada
entre tantos desvelos.
Cierro los ojos
¡no duermo!,
apareces ante mi mente
¡tan efímero!, tan ambiguo,
¡casi sereno!…
Quiero acariciar la faz de tu rostro
te desvaneces en el anhelo
que compunge mi pecho
y me aferro a la vida
sin tu cuerpo, sin tus manos
sin tus deseos…
¿Dónde andarás?
¿A dónde lleva tu camino?
A donde…
¿Quedarán añoranzas
aferradas a tu pecho?
Lejos… tan lejos…
¡lejos del mío!
¡lo sé!…
lejos de mi sendero.
Alexandra-