Aquí
en este mar
con pupila azul de cielo
En este viento, en este arenal
Con la tarde de verano
en tus brazos
se asomó tu piel en el ángulo
blanco del tiempo.
Aquí
aún está la vieja casa
de rosas y eucaliptos
¡Cuántas cosas nuestras
todavía quedan!
El sillón de mimbre
en el que tejió la abuela
rostros amados que ya no son,
pero que no se fueron.
Brindo por la infancia mágica
blancas horas guardadas
asomadas desde el fondo
del alma, secreta.
Por tu gloriosa juventud… estrella
en el perfil de la noche
Aquí estará como ayer…
la taciturna luna
Aquí gritarás que
más allá de duelos y rebeldías
siempre estará la mano
que acunó tu cuna
el Ángel protector
que veló tu sueño…
Ya no habrá tristeza
detenida en una sonrisa
pronto tejerás velo de novia
y el paisaje erizado en mil colores
a través de tu lágrima.
Tus ojos húmedos de amor
sellarán el milagro de la vida.
Con amor para mi nieta
Beatriz Moroni de González-
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