Poemas

Bajo las luces rojas

Sus cuerpos bajo aquella luz rojiza,

su desnudo irreal entre la rasa niebla.

Fosforescía el cuarto, altas paredes

con blancos azulejos. Pensé: es un hospital,

quizás la habitación de revelado

de un amigo fotógrafo. Pero aquellas dos lunas

gemelas en un cielo azul cobalto

eran de otra galaxia, y miré el firmamento

y no reconocí ninguna estrella

que antes que yo miraran otros ojos humanos.

Era un bárbaro rito el que cumplían

ante mí aquellos cuerpos. Pude apenas saber

de una desolación y una belleza

que el deseo no nombra, y sentí que espiaba

el fondo más secreto de mí mismo.

Goce o dolor, su voz se rompía en mi pecho,

aunque al oído fuera indescifrable.

Mirándose a los ojos durmieron en su abrazo.

Ciego ascendía un sol agonizante

Y era fría su luz en el alba indecisa.

Bajo aquella luz roja, en un mundo ya muerto

como yo mismo vi borrarse a los amantes.

 

De “Espejos”

Abelardo Linares-

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