Poemas

Jurisdicción del revoque

Frente a mi puerta

hay una pared que me saluda

todas las mañanas.

No tiene azulejos

ni un árbol que le dé la espalda.

No tiene las patas de un pájaro

verdes salamandras

ni conjuntivitis.

Está desnuda la pared saludadora

atrincherada y presa en su trinchera

esperando

un mensaje de amor

una puteada

el fruto de una brusca calentura

algo que la vuelva diario

para tener todos los días hojas nuevas.

Sin embargo me saluda

cada sol

con su pesada gota de revoque

y por algún retazo

me muestra el rojo vivo de su entraña.

No me va a convencer

por mucho que haga

me cuesta creer su corazón de piedra.

 

Poema de Jurisdicciones

 

Julio Carabelli-

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