Amenazan con borrar
las palabras,
los pecados generales
de todos los deicidas.
Venden grafitis:
el nombre de los desaparecidos
sin la mínima
piedad,
el escarnio
en sus costados.
La culpa convertida
en vergüenza.
Combatís
para no ser cómplice
del genocidio.
Siempre habrá verdades a medias.
Es la insania en el tercer milenio.
Cuesta sobrevivir!
¿Es la historia de los pueblos su deuda externa?
Miguel Fajardo Korea-