Poemas

Después de mucho tiempo…

Después de mucho tiempo

nos cuesta acostumbrarnos.

Ese extraño nosotros dejó huellas y vuelve.

Al cuarto día, al quinto ya se hacen

familiares el acento que traes,

la camisa, zapatos, tu encendedor, la pluma.

Pero un poco incomodas.

Y de alguna manera, absurda, eres el muerto

regresando despacio sobre el húmedo polvo

que dejó tu vacío: el lomo de algún libro,

los bordes de los cuadros,

la dudosa manija del ventanal que, entonces,

abría hacia otros vientos.

 

Del libro Vidario

José Antonio Cedrón-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *