Poemas

Llevo

Llevo incontables nacimientos, innumerables muertes

De ahí mi pérdida en el tiempo.

Todo mi ser es un niño y de repente todo mi ser es un viejo.

No me mires las marcas de fatigas

El torso ya inclinado, los ojos cenicientos.

No te confundas

Las marcas de las muertes han ido produciendo derrumbes.

Se me caen los brazos

Los muslos

Los senos.

Mi cabello va entrando lentamente

En la maraña de batallas perdidas

Y ha renunciado a su color.

Mira, eso sí

La vida que gira como loca, mi alegría de sentir

El desborde de mis manos acariciando tu cuerpo

El derroche de mi corazón precipitado

La inconciencia de rodearte la cintura y caminar por la calle

Así, como una adolescente atropellada

Sin mirar mientras nos miran, sin oír, solo oyéndote.

Mira la algarabía de todas mis palabras que salen desde adentro

Sin dobleces, sin vueltas, a plena luz del día

Poniendo lo que siento sin pensar

Por una vez, no pensar.

No pensar.

Voy a tratar de convencerme que no tengo edad

Que nací ayer, que nací hoy, que naceré.

Voy a tratar de convencerme que soy atemporal

Que soy una inmortal

Para amar

Sí, tal vez tan solo para eso, para amar.

 

Liliana Marengo-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *