Poemas

Oh, luz

Oh,luz que reverberas dentro mio
eco persistente del alma enamorada
deja tu huella caprichosa en aquel vacío
y cuida celosamente tu morada.

La tierra da cuenta de éste añil frío
asiste cotidianamente a su alborada
intenta hacer caso omiso del hastío
y en ocasiones se siente amedrentada.

Vientos de esperanza la ilusionan
bombardeos la mantienen acorazada
pero el hombre brilla y la coronan

con la paz que encuentra diademada,
resurge como el fénix al que adoran
y grandiosa te abraza iluminada.

Bárbara Himmel-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *