Aún nos quedan sueños

Casi sin darnos cuenta
a la tercera edad llegamos,
el tiempo con su paso raudo
nos aproxima al ocaso.
Pero aún nos quedan sueños,
hagámoslos realidad
no vivamos de recuerdos,
cultivemos la amistad
pues si una dicha se apaga
esta vuelve a aparecer
en la sonrisa de un niño,
o en un bello atardecer.
En el vaivén de una ola
o al contemplar los naranjos en flor,
cosas que a veces olvidamos
en este ritmo alocado y veloz.
Entreguemos amor a manos llenas,
vivamos los minutos y el presente
que el tiempo es como mar sin puerto
y nos arrastra veloz en su corriente.

Elizabeth Minvielle Moreno-