Solo
Hoy
que salí a la calle
detrás de un ciego enloquecido
y me filtré en los tubos de todos los resumideros
hoy que paré un taxi
y no me fui
pero en cambio me aplastaron los ojos en la calle,
y nadie habló conmigo
y un poema no me vio,
hoy precisamente
que llueve como perros
y el termómetro indica
algo sobre mi corazón,
hoy que ya no creo
ni siquiera en mi nombre
y un laburante chala un tabaquito en los labios,
hoy que me mudé
al décimo planeta
y mi conciencia engordó
hasta explotar de asco,
hoy
exactamente
me arrepentí de todo.
Ernesto San Millán- |