El indio no es el que mira usted…
El indio no es el que mira usted en el catálogo de turismo, cargando bultos o llevándole comida a la mesa. Tampoco el que ve desde la ventanilla y pide monedas haciendo malabares, ni el que habla una lengua muy otra y resiste fríos nocturnos. No, el indio está adentro, y a veces se le…