Poemas

Ocaso

La luz en pie de Ocaso compagina

al del Oro sangrante de la rosa;

y suma cardinal y milagrosa

al viraje del sol en la colina.

 

La fuga de las cosas se adivina:

diríase una escala luminosa,

por donde asciende el aria jubilosa

que al corazón de la floresta afina…

 

Más la tregua de un día pajarero

-en nidales de celo y alborozo-,

elige permanencia en el alero…

 

Y un éxtasis de dicha se presiente

-al expirar un ágave gozoso-,

¡tal un místico albor, en el poniente!

 

Lilian Serpas-

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *