Amor te reto a venir a mi piel, si quieres bésame hasta el amanecer, te invito a quitarte tus ansias y tu sed, pero te advierto que puedes tus labios perder. Os desafío a que te prendas de mi respiración, y hasta puedes comerme a besos, pero, no des un sólo paso en falso…
¿Ves esa vieja escuálida y horrible?, pues oye, aunque parézcale imposible, fue la mujer más bella entre las bellas. El clavel envidió sus labios rojos y ante la luz de sus divinos ojos, vacilaron la luna y las estrellas. Y hoy, ¿quién puede quererla?, ¿quién un beso podría darle con tímido embeleso? – ¡Yo!-…
Mírame como te veo sin sentir ¡te deseo! Gotas de alcohol brotan tu nombre sin medir la aquella noche, tengo sed de tu nombre huelo el sucio edén de mi hombre. Me engañaste ¡oh mi fiel ternero! fiel perro hambriento, arrastrado vas sin medida tocando la piel de una fiel enemiga. Goza…
La distancia, no separa… la distancia no arrebata lo que el corazón siente, esa distancia hiere, pero no mata. La distancia que mata, que todo te arrebata, esa distancia que ahoga que oprime, amordaza y que apaga que fatiga y amedrenta… esa distancia es otra. Es la distancia de tu silencio es la…
Extiendo mis alas al son del viento, soy inquilina de las nubes violeta. La adrenalina es mi tanque de oxígeno y correr el peligro, mi apellido. Volar alto es mi realidad, llevo un par de años y no me lo impide la edad. No conozco de muros, tampoco de rejas. La única pared que…
En la puerta del alma vive Dios y no lo vemos. Para verlo hay que desprenderse de sí mismo y emprender un camino de humildad en silencio. Uno debe ser tan dócil como el polvo del camino. Es el amor de Dios el que llena nuestra alma. Es el amor de Dios el que…
¡Qué lindo es habitar éste, mi sitio! ejercitar costumbres aprendidas, darle más a las rosas (a pesar de sus espinas). No abandonar jamás el propio nombre y seguir deseando los deseos. Sentir un poco de eternidad ante los grandes misterios. Reconocer que cada espejo devuelve y recrea la propia belleza radiante en el propio semblante.…
Tengo en mis pupilas la imagen quieta del gigante de arena. Y en mi interior, todos estos momentos abrazada a tu cuerpo. Las tardes tranquilas a tu lado cuando el tiempo dibuja lentamente la caída del día y tus brazos me dan el refugio necesario que este corazón necesita. Y con esa tranquilidad…
En la memoria ya marchita de la existencia comienza día a día la danza de los recuerdos que son una mezcla de sinsabores agridulces… Allá lejos están los sueños, vivencias, alegrías que cada día recordamos sin prisa ni pausa para no dejar detalle nostálgico sin revivir… Cuánto cuesta traer de lejos y hace…
¿Cuándo fue la única vez que el cielo ha amado? ¿Cómo las flores han dejado sus lágrimas de rocío en la tibia tierra? ¿Cuándo fue, que en lo profundo de tu corazón alguna vez no te has enamorado? Como es, en primavera vil, el calor del sol no se compara con el ardor de mi…