Poemas

Una vela

Una vela lentamente se derrite,

de a poco cubre el viejo candelabro,

sin darse cuenta, es ella quien compite

con las manos de un genio artesano.

 

L alarga llama que perforó el pabilo,

en esa hoguera de sueños delirantes,

va devorando el delgado hilo,

delineando una escultura de vela, interesante.

 

Parecen rayos de una estrella de marfil

que en el aire quedan suspendidos,

mientras que la vela, consumida al fin,

parece un sueño que en la noche se ha perdido.

 

María Raquel Leonelli-

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