Las palabras ascienden al árbol
para escapar de los silencios,
muros que las cercan.
Las voces deletrean quejidos,
agitan enojos,
endulzan oídos deseosos de amor.
Palabras liberan
las emociones atrapadas,
designan cada cosa y cobijan,
lo misterioso de la espera.
Graciela Di Laudo-