Poemas

El Torito, mi primer perro

Los lápices que se esparcen

por la casa me recuerdan

aquellas caminatas

por las tierras del sol.

 

Del patio un caldero de cobre

con burbujas de dulce de higo.

Que a escondidas y quemándome,

a la siesta gustaba probar.

 

Al tío yugoeslavo que tomaba mate

bajo la glorieta en flor,

y que un buen día me ungió:

“Serás la cebadora de mate de la
familia,

Martonita”.

A los tres años, gran emoción…

 

La enorme biblioteca de mi tía mayor.

El baño con densa neblina. Y su tocador.

La tía en su bata. Con guantes,

revisando el polvo.

Ardida de calor.

 

Al lado

una boquilla de oro

con un cigarrillo apagándose

al ritmo de un sillón.

 

Los azahares, el auto,

mi grito de dolor.

Cruzábamos la calle.

Mi padre iba conmigo.

Torito iba adelante

Murió en mi brazos. Con un suspiro.

Frente a la casa de mi tía mayor.

 

A mis queridos tíos, Flora Zabaleta
de Jakas y Marcos Jakas – QEPD

Villa Cañás, 1940

 

Marta Zabaleta-

Comments

  1. Querido Marcelino:
    me han dado una gran alegría al encontrar en tu página este poema – memoria mio, que me transporta a aquella infancia santafecina, tan plena de sabores, olores y afectos.
    Muchas gracias por vuestro permanente apoyo a mi presencia en nuestras tierras.Y mis mejores deseos para vuestro trabajo de abrir espacios a nuevas y no tan nuevas, voces poéticas.
    Les deseo un gran año 2012!
    Abrazos desde Londres
    Marta

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